

La jornada, de alta participación, contó con la exposición del ingeniero civil Alejandro Ruibal, CEO de Saceem y recientemente reelecto presidente de la Cámara de la Construcción del Uruguay. Su liderazgo en el proyecto refleja el respaldo técnico e institucional que impulsa esta transformación.
El Tren-Tram recorrerá aproximadamente 35 kilómetros, uniendo Plaza Independencia (Montevideo) con El Pinar (Ciudad de la Costa), pasando por corredores estratégicos como Avenida 18 de Julio, Avenida Italia y Avenida Giannattasio. El trayecto contará con 33 paradas y ofrecerá:
Desde el punto de vista cualitativo, el proyecto busca mejorar la calidad de vida de los habitantes, reducir la congestión vehicular y fomentar un desarrollo urbano más sostenible y conectado.
Una encuesta realizada por Equipos Consultores en mayo de 2024 reveló que el 82% de los residentes de Montevideo y Ciudad de la Costa apoya el proyecto, valorando principalmente su rapidez, bajo costo y beneficio ambiental.

La entrevista se realizó en el marco de una instancia de profundización sobre el proyecto, impulsada también para conocer de primera mano detalles relevantes para el trabajo que desarrolla la Unidad de Extensión del Instituto de Alta Especialidad de Movilidad Renovable. En este contexto, Jacobo Malowany, integrante del equipo de dicha unidad, participó activamente en la jornada, recogiendo información clave para los programas educativos y de innovación vinculados a la movilidad sostenible.
—¿Cómo definiría el espíritu del proyecto Tren-Tram?
«El Tren-Tram es mucho más que una obra de infraestructura. Es un cambio de paradigma. Buscamos ofrecer un transporte moderno, eléctrico, accesible y eficiente que conecte a Montevideo con Ciudad de la Costa de manera sostenible. Es una apuesta fuerte por el futuro de la movilidad.»
—¿Cuál es la principal ventaja que traerá para los vecinos?
«La primera ventaja es la mejora en los tiempos de traslado: estimamos una reducción de hasta un 40%. Pero también se trata de confort, de seguridad, de accesibilidad. Será un servicio pensado para todos, incluyendo a personas con movilidad reducida.»
—¿Cómo fue la recepción de la comunidad durante esta presentación?
«Muy positiva. Sentimos un gran interés y también responsabilidad. La gente entiende que un proyecto de esta magnitud implica cambios, pero también ve los beneficios. Hubo preguntas, propuestas, incluso sugerencias que nos llevamos para seguir trabajando.»
—Desde el punto de vista técnico, ¿cuáles son los mayores desafíos?
«La integración urbana es uno de ellos: el Tren-Tram deberá convivir con el entorno existente, minimizando el impacto durante la obra y potenciando el desarrollo urbano a su alrededor. Además, trabajar en corredores viales tan utilizados exige una planificación detallada y diálogo permanente con los actores locales.»
—¿Qué rol cumplen el sector privado y la comunidad organizada, como la Cámara de Comercio y la Asociación Turística?
«Son fundamentales. No concebimos este proyecto sin diálogo y sin consenso. La Cámara de Comercio, la Asociación Turística de Canelones y otros actores son aliados estratégicos. Son quienes conocen el territorio, las dinámicas locales, y quienes nos ayudan a pensar el proyecto más allá de la obra física: como motor de desarrollo económico, comercial y social.»
—En términos de plazos, ¿qué podemos esperar en los próximos meses?
«Actualmente estamos en la etapa de factibilidad y consultas. Si todo avanza de acuerdo a lo previsto, podríamos estar comenzando las obras hacia fines del próximo año. Será una etapa de grandes transformaciones, pero que abrirá un nuevo horizonte para nuestra región.»
La presencia activa de empresarios, comerciantes, actores turísticos, candidatos a Alcaldes y vecinos reflejó el interés real por participar en la construcción de este futuro compartido. El proyecto Tren-Tram no es solo un desafío de ingeniería: es una oportunidad para repensar la ciudad, su crecimiento y su calidad de vida. Daniel López en representación de la Asociación Turística de Canelones, destacó la importancia de generar espacios de información y diálogo abiertos. A su vez, valoro el esfuerzo de la Cámara de Comercio de Ciudad de la Costa, que con su organización hizo posible un encuentro enriquecedor para toda la comunidad.