

SI a usted le duele todo el cuerpo, desde la punta de la cabeza a la punta de los pies y, los exámenes paraclínicos (análisis de sangre, radiografías y otros estudios) no revelan nada, es factible que pueda padecer de FIBROMIALGIA.
La fibromialgia es una condición médica caracterizada por dolor crónico de por lo menos tres meses de evolución, en los músculos y estructuras que los rodean (tendones y ligamentos) los cuales están extremadamente sensibles a la palpación.
Lo interesante de esta enfermedad es que acompañando ese dolor musculoesquelético que puede ser más o menos generalizado se incluyen una serie de síntomas que en principio no tienen relación unos con otros, como ser: fatiga, dolor de cabeza, dolor de pecho, alteraciones del sueño (insomnio, despertar muchas veces en la noche, no dormir en profundidad), pérdida de memoria, dificultades en la concentración, síndrome de colon irritable (alteraciones intestinales, diarrea, estreñimiento), vejiga irritable (alteraciones en la micción), depresión, angustia, ansiedad, sensación de hinchazón corporal (sobre todo en la cara, manos y pies), sensibilidad al frío, adormecimiento de brazos y piernas, zumbidos en los oídos.

A pesar de toda esta sintomatología, la persona luce saludable, los análisis de laboratorio dan todo normal, parecería que no se tuviera nada, y en definitiva muchas veces los ajenos no creen todo el sufrimiento que se está padeciendo, incluso sugieren que el enfermo vaya al psicólogo.
TRATAMIENTO DE LA FIBROMIALGIA. La fibromialgia cursa con crisis y remisiones. La misión del médico es tratar que las primeras sean cada vez menos dolorosas y, los periodos ínter críticos cada vez mas prolongados para que el paciente sufra cada vez menos. Luego de realizado el diagnóstico, se le realiza un tratamiento con enfoque multidisciplinario: 1- mental-emocional. / 2- físico. Los resultados obtenidos son en general muy buenos.