Se realizó emotivo reconocimiento a Laura Martínez por sus 42 años de trayectoria
septiembre 18, 2023
Laura Martínez recibió un reconocimiento a sus 42 años de trayectoria. “Estoy muy agradecida por este homenaje en vida”
septiembre 19, 2023

Entrevista al exitoso empresario Daniel Cervini: una valiosa historia de dificultades y logros

Daniel Cervini

Por Silvana Brustia Caperchione

El Grupo Cervini, -que recientemente celebró su 22º aniversario-, está conformado por tres empresas – miembro: Centinela Seguridad, Taxis El Tiburón y Natur Limpieza. El mismo se caracteriza por contar con capitales 100% uruguayos y con más de 1600 colaboradores. La cabeza de esta exitosa empresa familiar es el coronel retirado Daniel Cervini, con quien SHOP NEWS mantuvo una charla profunda para conocer, sobre sus inicios que no fueron fáciles, acerca del largo camino recorrido, las características y diferenciales de su negocio, el avance tecnológico, la Fundación Ave Fénix que impulsa, y también pudimos “acercarnos” al hombre y su visión detrás del empresario reconocido.

Grupo Cervini actualmente es hoy una conglomerado de empresas reconocidas, pero ¿cómo fue el inicio? ¿Cuál fue el punto de partida?

-Voy a la raíz, y en algunas partes hablaré en plural, porque en esta historia de vida está muy unida mi señora. Codo con codo. Las parejas son un complemento. Ella estuvo a mi costado y yo estuve a su costado. Nunca  estuvo uno adelante del otro. Juntos, movimos el mundo y logramos que la familia esté unida.

Éramos 2 gurisitos canarios, de familias económicamente pobres, solo en ese sentido. Ambos estudiamos y logramos recibirnos. Por mi parte en el ejército y ella de maestra. Dos rubros que son mal pagos en nuestro país, por lo tanto no nos daba para llegar a fin de mes.

Por eso, aparte de ejercer nuestras profesiones en Canelones, dábamos clases particulares, tuvimos carro de chorizos, vendimos sandías, etc. Hacíamos todo lo que estaba a nuestro alcance para salir adelante.

En el año 2001, un vecino que se iba del país me comentó que vendía su taxi, lo cual me pareció una buena oportunidad de negocio, así que vendí mi auto Volkswagen, puse 1000 dólares encima, lo compré y comencé a manejar. Rápidamente acaparé el mercado, pero porque lo hice con un concepto muy diferente al común de los taxistas, ofreciendo calidad de servicio. Primero que nada me puse saco y corbata, con una imagen impecable. Luego, por ej., si tenía que levantar clientes de un hotel, en vez de tocar bocina desde el auto, bajaba a la recepción, saludaba, preguntaba quienes eran los pasajeros, trasladaba sus valijas al baúl del auto y también cumplía el rol de guía turístico.

Eso me permitió ganar bastante propina, pero sobre todo hacerme de clientes fieles que me volvían a contratar y también me recomendaban. Por otro lado, colegas míos se fueron quedando sin mercado y fui comprando sus taxis, invirtiendo, cuando no teníamos dinero. Hoy tenemos el 80 % del mercado de la Costa de Oro.

Una empresa familiar

¿Cómo amplió su negocio en el rubro de seguridad y limpieza?

-Enseguida de tener el primer taxi, un ingeniero que estaba haciendo una obra me pidió que le recomendara personas ya que estaba necesitando dos serenos. En ese momento le respondí que yo se los daba. Me la jugué. Obviamente que tuve que abrir una empresa, hacer los trámites legales frente al Ministerio del Interior, pero ahí nació Centinela Seguridad. Los serenos los saqué del pueblo. Les di trabajo a dos conocidos.

También en el año 2001, me comentaron que había que limpiar un complejo turístico de la zona y realicé lo mismo. Conseguí  5 o 6 personas y ahí se inició Natur Limpiezas.

¿Se trata de estar en el momento justo?

-Más que nada, te diría que se llama tener necesidad y luego, claro está, el hacerme responsable que tenía que alimentar a mi familia.

¿A partir de ahí como se fue desarrollando?

-Ese primer cliente de la obra, era Teyma, la empresa constructora más grande del país, que vino a construir Tienda Inglesa, por lo cual, al poco tiempo la tuve de cliente. Grupo Cervini se fue ubicando en ese nicho de mercado, se fueron sumando McDonald´s, Grupo Disco y una gran cantidad de empresas importantes.

Pero como no sabía cómo ser empresario, ya que no vengo de una familia de esa índole, como había visto en las películas que la mejor Universidad era Harvard, en el año 2004 me comuniqué con ellos y estudié por correspondencia Gestión de empresas. Fui en el primero en que invertí en educación.

Junto al presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou

¿Cómo formó su equipo de trabajo?

-Ya para el año 2006 fui sumando algunos gerentes, y mis cuatro hijos, quienes todos los miércoles a las 16 y 30 horas tenían capacitación mediante charlas obligatorias.

¿El modelo de negocio es ser una empresa familiar?

-Más que nada utilicé la empresa en el sentido de fortalecer la formación de mis hijos. Pero no para que lo aplicaran en mi empresa, porque para mí, ser empresario no es un proyecto de vida personal, nunca lo fue y no lo es hoy. Solo me sale bien. Por lo menos los números dicen eso.

Si bien, las empresas familiares tienen algo fantástico que es que está la familia, también eso puede resultar un problema. Es todo un arte saber manejar ambas.

Seguramente nadie lo sepa a la perfección y además somos seres humanos, todos cometemos errores. Pero por ahora la familia y la empresa están y no la hemos destruido. Es más, el único rol que me interesa cumplir con mis hijos es el de ser papá y preservar el vínculo con ellos, quienes han ido estudiando, recibiéndose, trabajando en otros lados. Hoy están los cuatro, pero no siempre fue así.

Junto a la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse

No existen formulas, pero sí ciertos parámetros para poder congeniar familia y empresa…

-Lo primero es no dejar nada debajo de la alfombra, no esconder. Porque después las reacciones son múltiples. En la familia, si hay dialogo, todo tiene solución. Es el primer gran secreto.

Durante la fiesta del 22 º Aniversario, todos nos saludaban, nos felicitaban, pero yo les decía que nosotros no somos de fotografía, ni lo vendemos, no somos la familia Ingalls, ni pretendemos serlo.

“Me siento realizado porque cumplí con la responsabilidad de alimentar y formar mi familia y ahora cumplo con una multitud”

Durante esta permanencia ininterrumpida en el mercado han debido enfrentar varias crisis del país. ¿Cuáles son y cómo han logrado crecer aún más?

-La primera fue en el año 2002, en plena crisis económica se nos caía la empresa. Y si bien, en vacaciones de invierno teníamos planeado irnos a Las Termas, las suspendimos y salí a la calle a vender. Dios me ayudó porque tenía 18 trabajadores y tuve que tomar 23 más.

En un día que salí a vender, crecí en un 100 %. Puedo decir que todos los clientes de mi empresa los fui haciendo. Soy el único vendedor porque quiero que mi cliente sepa exactamente qué es lo que va a recibir y que lo sepa por mí.

El segundo quiebre fue cuando aparecieron los Consejos de salarios. Pero la adaptabilidad es una de mis características.

Además puede ver los cambios antes, porque hay tendencias y si uno las sigue, juega antes. Recuerdo que 6 u 8 meses antes los salarios no estaban regulados por lo cual, les subí el salario a mis empleados y lo trasladé a los clientes. Entonces, cuando se regularon, ya nosotros estábamos adelantados y no perdimos.

El tercer gran cambio fue con la aparición de las Ley de las Tercerizaciones, que establece que la empresa que contrata también es responsable por el personal de la empresa contratada. Así que visité uno a uno a mis clientes, les informé sobre dicha ley y les empecé a entregar todos los meses la información (certificados de BPS, DGI al día, la fotocopia del recibo del sueldo que cobraban mis empleados, la planilla de trabajo). Otras empresas se fueron enterando y por ese gesto capté un gran número de estas.

Autoridades presentes en el 22º Aniversario de Grupo Cervini

La economía uruguaya fue bajando durante 2015, 2016, 2017, 2018 y en 2019 siguió bajando. ¿Cómo subsistieron?

-Cuando hay momentos de crisis, aparezco. Recuerdo que en el año 2019 estaba en un límite que tenía que sacar administrativos, gerentes, tenía que calcular eso. Miré por donde iba a ir el país. Y vi que era por UPM, por lo que 6 meses antes me instalé en Paso de los Toros, tomé un sub gerente, puse anuncios y publicidad en los dos periódicos de la zona, me hicieron notas en la radio, estuve con el alcalde, fui a visitar la empresa constructora y en el 2020 que comienza la obra en plena pandemia, nosotros crecimos 21 %.

Pero UPM no es solo UPM. Las rutas que llegan a ella también lo son y los puentes que se hicieron. No solo se necesitó seguridad, sino también limpieza. De este modo, salvé a todo mi equipo.

¿Cómo llevaron adelante la pandemia?

-Un tiempo antes, se incorporó mi hija Rosario, abogada, experta en control de lavado de dinero, para la reestructura de la empresa en cuatro o cinco aéreas que eran insuficientes. Recuerdo que el 13 de marzo, se declaró la pandemia y el 14, planificamos todo. Me declaré un salvaje y por supuesto que seguimos adelante con dicha reestructura que logramos cumplir. Hoy es más grande, más eficiente, más rentable y más agradable en su interior.

¿Cuáles fueron los avances?

-Se incorporó gran cantidad de tecnología. Antes contábamos solo con seguridad física. Ahora ofrecemos seguridad con tecnología de todo tipo. Desde apps de ubicación, código Qr, etc., lo que nos permite además, poder contar con la información de que nuestros empleados realmente están cumpliendo sus tareas. Esto es de una gran utilidad y eficiencia para nosotros, así como también un respaldo muy importante para el cliente.

De tecnología estamos en condiciones de hacer lo que sea porque ya nos han probado todos clientes internacionales. Nos ubicamos en un perfil de calidad alto con los clientes, por lo que nuestros competidores son las multinacionales.

También se reestructuró todo la logística. Hoy, hay macro clientes a los que les diagnosticamos lo que tienen, le elaboramos una propuesta en base a eso y nos contratan. También tenemos el centro de monitoreo, aunque a algunos clientes les instalamos centro de monitoreo en su lugar.

Asimismo en el rubro de limpieza se incorporó maquinaría que es muy importante. Por ej.: tenemos una máquina que acabamos de traer que desde el piso llega a 20 metros de altura, lo cual es mucho en nuestro país.

Junto a Laura Raffo

Tenés un grupo de 1600 personas a tu cargo, ¿que deben tener los empleados para ser parte de grupo Cervini?

-Tenemos 2 rubros que son limpieza y seguridad que ocupan los nichos de población económica más disminuidos económicamente. Por lo tanto, contamos con un Instituto de Enseñanza habilitado a nivel nacional desde el año 2008. Un taxista tiene que tener libreta de conducir, sino tiene no importa. Lo orientamos como conseguirla. Y luego lo capacitamos.

Somos formadores de personas. Nos interesa darles más herramientas y los capacitamos en las destrezas que tienen que tener. Por ejemplo, un vigilante tiene que tener ciertos conocimientos que se lo impartimos, un limpiador tiene que tener habilidades en el uso de productos útiles y en la maquinaria que tenemos.

¿Cómo enfrentan la competencia?

-No miramos para afuera, siempre miramos hacia dentro. Nosotros tenemos que ser muy buenos nosotros. Los demás nos pondrán la nota, pero uno sabe la oportunidad que tiene de hacer una cosa, o el error que está cometiendo. Cuando nos equivocamos, que puede suceder, nosotros tenemos que ser los mejores en la rapidez y en la calidad de respuesta frente a un error. Puede ser un error nuestro o una imprevisión del cliente que ocurren todos los días. O cosas que el cliente no lo puede prever.

¿Tienen varias certificaciones de calidad?

-Nosotros tenemos sistema de gestión de calidad en la empresa desde el año 2008. En ese momento me interesaba asegurar la vida de la empresa, y como no me quería ir del ejército, de ese modo me aseguraba que funcionara sin tener que estar presente.

Luego, mis hijos fueron tras más cambios. A mí que me encanta, los acepto. El año pasado tuvimos siete certificaciones, tres en la empresa de seguridad y cuatro en la de limpieza. Y en este año, a la vez se está trabajando en cuatro certificaciones más.

Ustedes impulsan además la Fundación Ave Fénix…

-La Fundación Ave Fénix se dedica a la prevención, promoción y tratamiento de la salud mental y adicciones. Buscamos el desarrollo cívico, educativo, personal, deportivo, cultural, social, moral y productivo de las personas. Contamos con equipos profesionales multidisciplinarios, desde técnicos, psiquiatras, psicólogos, operadores, acompañantes y educadores terapéuticos.

Ave Fénix surge a partir de mi hijo Enrique que es el menor. Cuando tenía 21 años se le ocurrió el proyecto. Armamos un equipo, redactamos los procesos terapéuticos que fueron aprobados por un técnico de gestión de calidad que nos dio la certificación y comenzamos.

Hace 4 años, mi hijo se presentó a una licitación del INAU, que la ganó y el proyecto está funcionando con más de 70 personas trabajando en Montevideo, con un hogar propio en la capital y una chacra. Además, tenemos acciones de prevención y promoción por lo que nuestros técnicos acuden a liceos, y a distintos ámbitos y a hogares.

Por otra parte, hemos tenido reuniones con el Ministro de Desarrollo Social, la Ministra de Salud Pública, nos visitó el director departamental de Salud Pública de Canelones en la chacra, estuvo el presidente del INAU y del INJU, la presidenta de INISA y nos reuniremos con la junta nacional de Droga. También, tenemos en carpeta la idea de la reinserción laboral de personas que salen de la cárcel, por lo que tenemos proyectos de huerta, ganadería, talleres de carpintería y empresas amigas donde reinsertar a la gente, porque se pueden tener los conocimientos y no los lugares donde colocarlos. Estamos consolidando además, una red con mutualistas y organismos del Estado. Que Dios nos ayude porque esto es para el bien del país.

Actualmente, a nivel personal, ¿cómo te sentís?

-Me siento en paz y tranquilo. Porque en nuestra familia, y lo decía cuando mis hijos eran chicos, había todo lo que no se compra con dinero. Faltaba el dinero y las empresas resolvieron lo que faltaba.

De todas formas, las empresas son algo material. El dinero no es un fin para nosotros, es una consecuencia. Lo vivo así. Tenemos mucho más de lo que necesitamos y a lo que aspiramos. No lo tiramos. Lo asumimos con responsabilidad. Tenemos 1600 personas que nos rodean. No comen caviar, comen arroz blanco, pero mi responsabilidad es que lo sigan comiendo.

¿Te sentís realizado?

-Sí, aunque no es un lugar de realización personal la empresa, sino que es un medio. La realización va por el lado que cumplí con la responsabilidad de alimentar una familia y ahora cumplo con una multitud. Si bien soy una bolsa de errores porque soy humano, intento ser responsable y cumplir con mi gente.

Considero que hice lo que entendí era mi obligación hacer en la vida. También creo que fui muy afortunado porque pude hacer lo que me gusta.

La vida se resuelve paso a paso y uno va construyendo un camino que termina siendo su destino por la sumatoria de decisiones que va tomando. En algunas las acerté y soy ganador, pero internamente sé que soy mucho más perdedor que ganador.

¿Por qué?

-Porque también pierdo. Y siempre espero aprender de las perdidas. Si Peñarol sale campeón y miramos cuantos puntos ganó y cuantos perdió, muchas veces pierde muchos más de los que gana. Así es la vida.

Durante la nota citás varias veces a Dios. ¿Qué es para ti?

-Yo tengo fe. Si vamos al diccionario de la RAE, la palabra clave es creer. Es un acto de fe. Muchas veces se compara con lo religioso y no es así. Creo que existe algo superior al ser humano. Durante toda mi vida «el flaco» me deja hacer uso del libre albedrío, que decida las cosas y que deje los pedazos en el camino hasta alcanzarlas.  Cuando me falta un piquito para llegar, parece que no llego, aparece. El porcentaje que ocupa en mis logros no lo tengo claro, pero sí sé que él forma parte.

¿Qué es tu familia para ti?

-Es un lugar de regocijo, de disfrute, de compartir con los hijos. Sí hay algo que me deja vulnerable, es que un hijo esté mal o que yo esté mal con uno de ellos.

¿Cuál es tu cable tierra?

-Aislarme. Probablemente sea Dios también.

Cuando puedo estar muy efusivo o tener alguna emoción desagradable, busco el equilibrio porque sé que mis decisiones pueden afectar a mucha gente. Soy consciente que tengo poder, por eso necesito el equilibrio.

Para eso tengo mecanismos o algunos trucos. Por ej., en mi escritorio puse una chaura con una plomada que es un instrumento que usan los albañiles para medir la verticalidad de una pared que están construyendo, eso marca el equilibrio. Es un mensaje que me auto regalé.

Por otro parte, cuando lo necesito, me aisló, me siento en el pasto, en un lugar que me permita conectar. El verde del pasto, de la naturaleza me hace mucho bien. Por eso también, soy de viajar prácticamente todos los días por el interior del país, me da más equilibrio.

¿Te consideras un hombre feliz?

-No es mi sentir. No sé que es la felicidad, solo sé lo que son los momentos felices. Entonces trato de saborear esos momentos, porque esos son los que te dan el disfrute de la vida. Como también tratar de sacar enseñanzas de los otros momentos que calculo existen para que aprendamos. Aprender de lo malo y quizás la próxima no cometamos ese error.

Comments are closed.