

El pasado sábado 12 de julio, Aguasol Hotel Termal volvió a abrir sus puertas al conocimiento y al compromiso con el planeta, al realizar el segundo taller “Compostar en la Escuela”. Esta actividad, que tuvo lugar en la compostera propia del establecimiento, reunió a docentes, funcionarios de centros educativos y vecinos interesados en la sustentabilidad, reflejando una creciente conciencia colectiva en torno a la educación ambiental.
Más que una simple capacitación, la jornada fue una experiencia vivencial guiada por el experto en compostaje educativo Rolando Calvo, quien abordó desde una perspectiva práctica y pedagógica cómo el compostaje puede ser incorporado de forma sencilla y efectiva en el ámbito escolar. La iniciativa busca transformar los residuos orgánicos en recursos y, al mismo tiempo, sembrar en niños y niñas la semilla del respeto por la naturaleza.
Este segundo taller consolida a Aguasol como un actor clave en la promoción de prácticas sustentables en el departamento de Salto. A través de estas acciones, el hotel termal trasciende su rol tradicional de servicio turístico para posicionarse como un verdadero agente de cambio social y ambiental, promoviendo valores que conectan comunidad, territorio y futuro.
La actividad contó con el valioso apoyo de Ciclo Orgánico, el programa Líderes Infantiles y la Intendencia de Salto, generando una sinergia interinstitucional que refuerza el compromiso colectivo hacia una educación transformadora.
Como símbolo de esta conexión con el entorno, se entregaron a los centros participantes árboles nativos, donados por la Asociación Amigos de la Flora Nativa. Este gesto no solo embellece espacios educativos, sino que representa un acto de siembra consciente, donde cada árbol es una promesa de futuro.
El cierre del taller incluyó la entrega de diplomas a los asistentes, en reconocimiento a su compromiso activo con el aprendizaje ambiental. Más allá del papel, cada uno se llevó consigo herramientas para replicar este conocimiento y multiplicar su impacto.
Desde Aguasol se reafirma que la sustentabilidad no es un concepto abstracto, sino una práctica diaria que puede comenzar en cada aula, en cada patio escolar y en cada hogar. Con iniciativas como estas, la educación se convierte en la mejor aliada para construir comunidades más conscientes, resilientes y comprometidas con el cuidado del planeta.