(Porciones: 4)
2 kg de Matambre de cerdo desgrasado
1 taza de espinaca congelada, descongelada y picada
4 cucharadas de ricotta
1 sobre (7gr) de gelatina sin sabor
1 ají colorado, picado en cubitos
300 gr de tomates cherry
1 diente de ajo, picado
3 cucharadas de aceite de oliva
sal y pimienta, a gusto
Precalentar el horno a 180ºC (moderado). Separar una asadera. Extender el matambre de cerdo y quitar con un cuchillo cualquier exceso de grasa. Condimentar con sal y pimienta por los dos lados.
En un bowl, mezclar la espinaca con la ricota, condimentar con sal, pimienta y un toque de nuez moscada. Extender sobre el matambre sin llegar a los bordes. Salpicar encima con el ají en cubitos. Espolvorear todo el relleno con el polvo de gelatina. Enrollar el matambre con cuidado y atar con hilo de cocina. Envolverlo en papel aluminio y poner en la asadera.
Llevar al horno y cocinar 20 minutos. Subir el horno a 200 C º (fuerte) y cocinar con el paquete de aluminio abierto otros 15 minutos más. Mientras se cocina, calentar una sartén con aceite de oliva. Agregar los tomatitos y el ajo. Saltear unos 3 minutos apenas y condimentar con sal y pimienta.
Servir rodajas de matambre de cerdo con la guarnición de tomates cherry al ajo.